El tío Chispa
Todos los hombres y mujeres que hacen el mundo cada día, si hacen el bien, tienen el recuerdo de sus muertos. La idea de bien y la idea de recuerdo de los muertos hace la vida todos los días, el mundo. No vale redundar con fotos, relatos o pinturas sobre los muertos, pero las fotos, los relatos, las pinturas, a diferencia de los muertos, aun redundando, existen. Una foto, por ejemplo, es verdad; la muerte escapa a la verdad y a la mentira y en general escapa al entendimiento. Sólo se pueden escribir cuentos con ella: había una foto del Chispa, el menor de los hermanos, en la pieza de Felipa, su madre. Habían pasado años desde que había parido al menor de sus hijos y habían pasado años desde que el Chispa, el Chispita, el menor, en fin. Pasemos a la foto: estaba en la pieza de la casa de Felipa, que era muy pequeña. Tenía una pieza y una más pequeña cocina comedor y un baño afuera. ¿O estaba la foto en la cocina comedor? Donde estuviera, la foto del Chispa estaba para ser vista por los que la visitaran a Felipa. Los nietos la visitaban y ella repartía caramelos y retos y preparaba el mate. Está ese recuerdo en blanco y negro; la Felipa está muerta, hace años de esto. Sospechamos que el recuerdo de la muerte es en blanco y negro porque siempre las cosas han sido así: es o no es; está o no está; hay o no hay; la luz y la oscuridad; el uno y la nada. Siempre la primera parte es una cosa y el resto es inabarcable, infinito, impensable. Para hacer tolerable la vida atravesada por la muerte, la industria de la muerte inventó, en el siglo pasado, las fotos al óleo: de un original en blanco y negro se conseguía una reproducción en colores, con detalles de vestimenta que daban un dato realista a las fotos de los muertos. Habrá pasado algún vendedor por la casa de Felipa y le prometió una foto del Chispa en colores. La foto presidía los días de Felipa y los nietos –los sobrinos que el Chispa nunca conoció- observaban la foto hasta que tenían que hacer alguna pregunta acerca del muerto reverenciado. No importa lo que respondiera Felipa, importan, o importaron, los colores de la foto, el brillo, el menor, el Chispa: lo contrario de la muerte.
Damián Ríos
2013